Todavia era muy joven cuando el medico le informo de la fatal noticia que cambio por completo su vida y la de todos los demas en la familia. Recuerdo muy bien aquella noche, han pasado ya veinte años desde su partida de este mundo, y sin embargo aun puedo escuchar su llanto, sentir su deseperación y compartir su angustia al comunicarle desesperada la noticia a su hermana mayor, por cierto mi tia consentida. El cancer empezaba a crecer en uno de sus senos. Fue despues de un mnucioso estudio como se dieron cuenta de que un tumor maligno se alojaba en su pecho aún cuando simpre fue muy sana, es ahí cuando empecé a renegar de la vida, de Dios, de los hombres, del atraso de la medicina, de todo lo que me rodeaba por no poder ayudar a mi mama, que aun con su juventud y sus ilusiones, estaba enmedio de esa terrible y maligna enfermedad contra la que ni todos los adelantos de la ciencia, ni todos los estudios e investiagciones, ni todo el dinero del mundo han encontrado aun el remedio.
En lo sucesivo sus hijos vimos como se marchitaba rapidamente su cara, su cuerpo, su entusiasmo, sus ganas de vivir, su vida...
En adelente fueron interveciones quirurgicas que la lastimaron, la doblegaron aun mas y la dejaron con una terrible carga de salud a cuestas...
En adelante fueron muchas horas de hospitales, de espera, de estudios, de medicinas, de radiaciones que la dejaron sin pelo y le marchitaron aun mas el rostro, de lagrimas y angustia por no poder ayudarla, aun con nuestra profunda pena...
Luego cayo en cama, la vimos como vimos a mi abuelita años antes morir por la misma causa, por el mismo mal incurable. Tratamos de hacerle la vida agradable los ultimos meses, la medicina no ayudo, las radioterapias tampoco, ni las oraciones, ni las suplicas por que mejorara su salud, ni nada, pues el desenlace tragico vino muy rapidamente.
El dia que murio yo estaba con ella, no podia decirme lo que sentia por el tremendo dolor que se refeljaba en su rostro, al mal la consumio tan rapido que ya no pudo articular palabras cuando trato de despedirse, solo sus ojos, alcanzaron a decirme que me iba a extrañar, que me cuidara, que no sufriera por su ausencia...
Cuando la lleve al hospital ya no respondia, al llegar la instalaron inmediatamente en una cama, en espera del desenlace, atendida por dos enfermeras que le pusieron un suero no se para que si ninguna de las medicinas que antes le pusieron funciono..
Me di cuenta que murio cuando me solto la mano. Percibi que se fue a otro mundo cuando su respiracion agitada expiro el ultimo aliento. Senti como se acabo su vida y la nuestra, con su partida...
Nunca mas volvimos a ser los mismos sin ella. Todo cambio en la casa, en la escuela, en nuestras vidas. El pilar que sostenia nuestro hogar, cayo estrepitosamente y cada uno, nos fuimos refugiando en distintas cosas, mis hermanos en sus introvertidas actividades y sus estudios, mi papa en otra familia. Para mi lo mas facil fue el alcohol, y esporadicamente, algunas drogas...
Asi de rapido y tragico, el cancer destruyo a mi madre y cambio radicalmente nuestras vidas...
Hoy despues de veinte años de aquella terrible tragedia, nos consolamos en Dios y su infinita sabidiuria. Rogamos con muchas fuerzas que ilumine a un cientifico o un medico o alqguien que pueda encontrar la cura contra esta terrible enfermedad...
TESTIMONIO APORTADO EN FORMA ANONIMA...
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sábado, 14 de febrero de 2009
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